Serás por siempre
el titular de la Pista 2, donde todos los días de la semana, a las 15:40, jugabas con un amigo distinto. Yo he tenido la gran fortuna de
haber disfrutado de tu tenis en muchas ocasiones, y eso se quedará en mí para
siempre. Serás alguien insustituible en nuestro pequeño club, y te aseguro que
ya te empezamos a echar de menos.
En estos momentos,
de verdadera tristeza, me cuesta pensar en pasado, cuando hace unos pocos días
quedamos emplazados para echar “un peloteo”, eso que tanto te gustaba a ti y
que algunos no entendían. Tú disfrutabas jugando al tenis, no compitiendo en un
partido contra un rival y eso, amigo Rafa, era una pequeña muestra de tu enorme
generosidad. Nunca tuviste rivales en la pista, sólo compañeros y amigos de
juego.
Siempre dispuesto,
incluso capaz de hacer doblete por agradar a tus amigos. Eres y serás un tipo
genial allí donde estés, que seguro será el mismo cielo, pero transformado en
cancha de tenis.
Por desgracia nos
dejas, y para tu familia será el día más triste de su vida, porque en un
momento te has ido, y eso no es fácil de asimilar. Solo puedo deciros, que los
socios del Villa os mandamos un beso muy fuerte, y que a nosotros también se
nos ha marchado alguien muy especial, se nos va un buen amigo, se nos va una
buena persona.
Un socio del Club.
